Bebé: Hacia el final de esta semana estarán constituidas las 3 capas germinativas, que son un conjunto de células internas del embrión a partir de las que se originan los tejidos y órganos. Comienza a desarrollarse un espinazo que es el principio del cerebro, los nervios y la médula espinal (sistema nervioso central). En tanto, la futura placenta avanza rápidamente en su desarrollo. Tu bebé, que está protegido por el líquido amniótico, pesa menos de un gramo y es tan pequeño como la semilla de una uva.
Embarazada: A esta altura la hCG, conocida como "hormona del embarazo", es más evidente en el organismo y puede ser perfectamente detectada por un test casero de orina. Si estás sospechando algo y todavía no hiciste el test por miedo a que no sea certero, ya podés hacerlo. Y si te dio positivo, es momento de consultar al médico que te indicará los estudios que debés realizar, la primera ecografía en la que tal vez ya puedas ver a tu bebé y los cuidados que a partir de ahora deberás tener.
Sugerencias: Proteínas, calcio y ácido fólico deben ser parte importante de tu dieta prenatal. Una dieta sana es fundamental para el desarrollo de un embarazo saludable.
Pareja: ¿Ya hicieron el test y dio positivo? Es normal que te preguntes si ese resultado es certero, que mires como mínimo tres veces las dos rayitas y las compares con las instrucciones, por si acaso hayan visto mal, y que quieras salir corriendo a comprar otro test para confirmar lo confirmado. Pero lo cierto es que en los tests caseros de embarazo, el resultado positivo indica que se ha detectado la presencia de la hormona hCG (conocida como “la hormona del embarazo”), confirmando de este modo el embarazo. Sin embargo, el resultado negativo no siempre significa que no haya un embarazo, por eso conviene repetir el test unos días después en caso de que el retraso persista.